Seamos francos, los propósitos de Año Nuevo no los cumple ni Perry, porque siempre hay cosas más interesantes que hacer footing, correr, postureo, running, aprender un idioma o ponerse a dieta, como por ejemplo, mirar las musarañas o comerse una barra de chocolate y todos los restos de turrones de las Navidades. «El lunes me pongo…