Saltate el rollo (hoy es bien largo) pinchando aquí
Llevo un tiempo pensando si digo algo o no. Por que si lo digo va a haber mucha gente que se lo tome a la tremenda y me da mucha pereza.
Pero bueno, tengo que decirlo, son muchos años a cuestas con la misma cantinela.
Se habla mucho de el acoso, de la discriminación a las personas con sobrepeso u obesidad, es algo muy serio, y que implica muchos problemas, pero yo os voy a hablar del lado opuesto de esta circunstancia, cómo te ven ciertas personas con sobrepeso cuando tu no lo padeces.
Quiero hacer hincapié en el «ciertas» y remarcar que no digo todas.
Nunca he tenido problemas con la comida ni mi peso, al menos en el sentido de engordar. De pequeña si que estaba sustancialmente más delgada que la mayoría de niñas de mi edad, pero esto no suponía a mis padres ningún problema porque comía cantidades más que razonables de comida, mucha y muy variada con muy pocas cosas que no me gustaran en comparación con el infante estándar.
Ya entonces tenía que aguantar que algunas amigas con un ligero sobrepeso, nada anormal para una niña en crecimiento, me miraran con una envidia que yo no entendía en absoluto.
«Es que tu tienes mucha suerte porque tu no engordas»
En mi vida he conocido a mucha gente, con y sin sobrepeso y eso no ha influido ni de una manera positiva ni negativa en el concepto que tenía de ellos como personas, si me caían bien o mal era por méritos propios. (y hay gente que se lo curra mucho para que termines odiándoles como a la margarina). Me la trufa.
Aunque se dice que está mal clasificar a la gente yo he llegado a la conclusión de que existen dos tipos de personas con sobrepeso.
Las normales y las que tienen un problema serio.
Las normales son personas para las que el peso no constituye el centro de su vida, y asumen (salvando casos médicos) que si están así es por que comen demasiado y/o no hacen ejercicio. Y son francos con esa circunstancia. El problema, a veces, es que las circunstancias en nuestras vidas nos pueden empujar a hacer ciertas cosas cuando nos ponemos nerviosos, a mi me da por fregar compulsivamente, hay gente a la que le da por comer. «Estoy gordo porque como de más, no viene ningún enanito por la noche a estrecharme los pantalones» es algo que comentó una de estas personas. En algunos casos estas personas deciden ponerse a régimen y lo logran con mayor o menor fortuna. Es duro, la comida puede llegar a ser como el tabaco o una droga, es muy difícil dejar determinados hábitos y muy fácil recaer en ellos. Es un camino duro, y a veces solitario porque todo el mundo se ve en la obligación de señalar lo que haces mal y todos se convierten en dietistas expertos, cuando lo que realmente necesitas que te apoyen y te digan «Adelante, tu puedes, es solo un esfuerzo mas»
Alguna vez te dicen, «que envidia me das so perra», pero asumen que es su responsabilidad y que si quieren cambiar su circunstancia está solo en su mano.
Las personas que tienen un problema serio no tienen un problema serio con su peso, lo tienen con sí mismas. Lamentablemente he encontrado demasiadas personas de este tipo a lo largo de mi vida. Son personas que te sueltan perlas como:
«Claro es que tu tienes tanta suerte porque eres delgada y guapa»
Cosa harto cuestionable, tanto como en materia de suerte como en lo de guapura, ya que hay mucha gente que disiente, como por ejemplo yo misma.
«Es que tu consigues trabajo porque estás delgada»
Gracias, así que mis aptitudes técnicas, mi experiencia, o mi forma de hacer las cosas importan una puta mierda. Todo el trabajo duro no sirve de nada.
Esta última frase, bastante repetida a lo largo de mi vida, es sin duda alguna la más insultante que he recibido en todos mis años.
«No se como puedes estar tan delgada con todo lo que cocinas»
Normalmente este es el momento de la revelación:
NO ME COMO TODO LO QUE COCINO
La verdad es que no entiendo porque la gente piensa que si hago galletas me las como todas. No puedo decir que no haya tenido nunca un momento en el que me haya dado un atracón de algo, como por ejemplo la tarta de cebolla caramelizada, o unas cuantas galletas individuales de una sentada, pero estas cosas suceden con muy poca frecuencia ya que luego lo paso físicamente mal para digerir todo.
Hay veces que se me olvida que he hecho tal cosa o tal otra y se pone mala y tengo que tirarla (con todo el dolor de mi corazón), pero normalmente, la reparto entre trabajo, familia (si estoy en Valencia) o amigos.
Si horneo 12 magdalenas (o capqueis) lo mas posible es que me coma solo una.
Esto es lo que parece que las personas con ese problema serio no entienden, mientras oyes como se han comido un bote de Nutella (que a mi me puede llegar a caducar) a cucharadas, o como se comieron un costillar en el Fosters Jolibú con un brownie con helado de postre mientras te miran con una mezcla de desprecio y envidia, como si tu pudieras comerte lo mismo sin ninguna consecuencia.
NO
Siento disentir, pero no. Si yo llevara una dieta así también engordaría, no tengo ningún mecanismo ni tengo mi tracto digestivo recubierto de teflón para que no se absorban nutrientes. Así cagaría flores.
Para que os hagáis una idea de como es mi vida, como siempre en platos de postre, mi consumo de carne es super limitado, a veces una vez a la semana, a veces cada quince días. Las verduras suelen ocupar un 90% de mi menú, y no suelo tomar nunca postre. Los fritos están muy reducidos en mi vida, ya que me suelen sentar bastante mal. Me encantan las legumbres y me gusta tomarlas en potajes o ensaladas. Me chifla la pasta, pero si la como con mucha frecuencia me aburro.
Llevo los mismos pantalones vaqueros todo el año y cuando noto que me aprietan más de la cuenta es el momento de las cenas a base de fruta y yogur. Aunque hay veces que si no tengo hambre no ceno. Incluso en ocasiones cuando estoy muy concentrada y no tengo hambre manifiesta se me olvida comer. La ropa elástica como mallas y chandal solo la llevo para limpiar o dormir.
Odio hacer ejercicio, pero intento andar todo lo posible, aunque este verano me está destrozando con tanto calor y eso se nota en la blandurriez de mis piernas.
En resumen, no es fruto de la casualidad ni de un metabolismo mágico. Sólo son hábitos que tengo desde hace tiempo. Quizás que sea mas de salado que de dulce también influya, pero bueno.
El caso es que cuando hago determinadas cosas calóricas, como por ejemplo estos sandwiches, actúo en consecuencia. Si me he tomado uno para merendar y llegado el extraño caso de tener hambre por la noche, me limito a comer por ejemplo, medio calabacín salteado. Quizás la única ventaja que tengo es que me gusta el calabacín xD
Pero eso no importa, porque estas personas no paran de refregarte por la cara la suerte que tienes y lo desgraciados que son ellos. Como si tu vida estuviese solucionada por ser delgado, debe de ser el equivalente vital de un puesto de funcionario. Delgado no tienes ningún otro problema ni enfermedad, tus familiares no se mueren como el resto ni tienes mas carga de trabajo, no te deja el novio, o siempre tienes novio y eres súper feliz.
Siento romper vuestra burbuja, gente que tenéis un problema, pero a mi estar delgada no me ha librado de llevar gafas, ortodoncia y sufrir el desprecio de los chicos en el colegio, tampoco ha evitado que tenga una enfermedad dermatológica por la que no puedo tomar el sol y que me salgan lunares que pueden derivar en cáncer. Tampoco ha evitado que la gente de mi alrededor sufra ni que mis padres ganen mas dinero, varias parejas me han dejado y me han dejado el corazón hecho añicos. No deja mi ropa más blanca. Y mis vecinos siguen puteándome igual.
Francamente, lo que me ha sacado adelante en esas circunstancias ha sido mi voluntad y el apoyo de la gente que me quería.
En definitiva: Estar delgado no es la solución a los problemas.
Pero hay algo positivo, y que sí es la solución: Intentar ser feliz, y si no estás contento con algo intentar cambiarlo. A veces se logra y a veces no. Pero no te quejes sin haberlo intentado.
Me he quedado bastante a gusto diciendo esto.
Así que si estás a dieta, puedes hacer perfectamente estos sandwiches, comerte medio saboreándolo bien y animar el día a la gente que quieres dándoles uno.
Utilizan como base las Snickerdoodles que ya conocéis de este post y un helado de té chai que utiliza como base el de vainilla de este otro post con algunas variaciones.
Para los que no conozcan el té chai es un rico té muy especiado de la India que suele infusionarse en leche en vez de agua, o añadiendo leche a posteriori a la infusión. Puede contener cardamomo, clavo, pimienta, anís estrellado, jengibre y canela, aunque admite tantas variaciones como el guiso típico de tu madre. Puedes encontrar mezclas ya preparadas a granel o en bolsitas de infusión. Yo utilizo unas bolsitas de la marca americana Celestial que venden en Taste of America. También queda bien con el té Classic de la marca Yogi Tea
Helado de té Chai
Para aproximadamente un litro
Ingredientes.
250 ml de leche
500 ml de nata
5 yemas de huevo
200 gramos de azúcar
6-8 bolsitas de té chai
Prepara un bol mediano o una jarra resistente al calor con las 5 yemas de huevo.
Prepara un bol grande con hielo y agua suficiente como para que puedas meter dentro de él un bol mediano sin que se derrame el agua. Mete el bol mediano dentro. Coloca un colador sobre el bol mediano.
Pon la nata dentro de el bol mediano.
Pon el azúcar con la leche a calentar a fuego medio bajo. En cuanto empiece a hervir apaga el fuego y pon las bolsitas de té. Aparta el cazo o la olla del quemador y déjalo reposar 1-2 horas tapado hasta que se enfríe. Transcurrido este tiempo saca las bolsitas de té exprimiéndolas muy bien con dos cucharas o la mano para extraer el máximo sabor posible. Tira las bolsitas a la basura
Coge un batidor y ve vertiendo poco a poco la leche aromatizada sobre los huevos mientras los bates enérgicamente.
Una vez hayas incorporado toda la leche, vuelve a poner el cazo a fuego bajo/mínimo, y pon la mezcla de la jarra dentro. Este es un momento crítico, no puedes dejar de remover o la mezcla se cortará. Así que estate preparado.
Remueve constantemente hasta que la mezcla empiece a espesar tomando la consistencia de unas natillas muy líquidas.
La prueba de fuego de si la mezcla está lista, será cuando estando la espátula cubierta de mezcla pases un dedo y se quede un cerco bien definido y no chorree para un lado u otro. Retira rápidamente el cazo del fuego y pása la mezcla a la jarra donde mezclaste la leche con las yemas.
Vierte la mezcla a través del colador sobre la nata, remueve con la espatula dentro del colador para que pase el máximo liquido posible. Quita el colador y descarta los grumos que hayan quedado en él.
Mezcla la nata y la leche con los huevos.
Transfiere esta crema a una jarra apta para frigorífico y déjala enfriar en la nevera por lo menos 6 horas.
Para hacer el helado con máquina heladera.
Monta tu heladera según las instrucciones del fabricante. Normalmente implican congelar el recipiente contenedor del helado un mínimo de 24 horas, tenlo en cuenta antes de ponerte a hacer el helado.
Saca la mezcla de leche de la nevera y remuévela bien con una cuchara o un batidor.
Pon la heladera en marcha y ve echando dentro la mezcla de leche hasta que vacíes la jarra (ten cuidado con la capacidad de tu heladera, no continúes vertiendo si ves que va a exceder mas de la mitad de la altura de la misma)
Déjala trabajar hasta que el helado tenga la consistencia de una papilla muy espesa, casi de masa, no hace falta que el helado esté totalmente sólido. Vierte la mezcla en un recipiente apto para el congelador con tapa. Mételo en el congelador durante mínimo 3 horas.
Para hacer el helado sin máquina heladera.
Agénciate un temporizador.
Pon la mezcla en un recipiente apto para el congelador lo suficientemente grande para que la mezcla no ocupe mas de la mitad de la capacidad. Pon el recipiente destapado en el congelador. Pon el temporizador 45 minutos. Vete a leer algo, es mejor que ver la tele. Transcurrido ese tiempo, saca el recipiente, se deberían de haber formado cristales de hielo en los bordes de la mezcla, rompelos con un batidor de varillas de mano o con una minipimer, dale mucha caña, vuelve a meter el recipiente en el congelador. Pon el temporizador otros 35 minutos, repite el proceso anterior. Repite el combo de 35 minutos 2 veces. Vuelve a repetir el combo de 35 minutos otras dos veces más. Deja el helado reposar un mínimo de 3 horas antes de consumirlo.
Para servir, pon bolas o cucharadas de helado en boles.Si lo haces bien no necesitarás ni siquiera sacarlo 10 minutos antes para poder consumirlo.
Sandwiches de helado de Té Chai
Para unos 8-10 sandwiches
Ingredientes
1 Cantidad de helado de té chai (receta anterior)
1 Cantidad de galletas snickerdoodles (receta aquí) (Para esta ocasión prescindí de la ralladura de naranja y vainilla y los sustituí con un extra de canela y jengibre molido en la masa)
Saca el helado del congelador y déjalo a temperatura ambiente unos 5-10 minutos
Empareja las galletas, intenta que cada par sea del mismo tamaño o uno aproximado.
Con una cuchara grande o de helado pon una porción del mismo en el centro de una galleta, tu gusto dictará cuánto has de poner, ya que hay gente que le gusta mas galleta que helado y viceversa. Cúbrelo con la galleta y aplástalo con cuidado para que se extienda un poco hacia los bordes.
Si ves que tiene huecos rellénalos con una cucharada pequeña de helado. pasa un cuchillo redondeado por el contorno de la galleta para eliminar cualquier exceso y darle una forma bonita. Continua hasta que no te queden galletas o helado. Cómete lo que sobre, y un sandwich por el camino también es legítimo.
En este paso puedes rebozar el borde helado con chocolate rallado, caramelos wherters picados, fideos de chocolate o de colores. Siéntete libre de experimentar.
Envuelve individualmente cada sandwich en papel vegetal (o film transparente). Mételos en el congelador hasta su consumo.
Como en el post de el Helado de vainilla os recuerdo la máxima con la que os habéis de regir:
OMITIR LA GRASA O EL AZÚCAR SOLO RESULTARÁ EN DRAMA, PLAGAS ZOMBIES, PEOR TELEVISIÓN Y MUERTE MULTITUDINARIA DE GATITOS
Como siempre, notas interesantes:
- Aunque no tiene mucho sentido, puedes utilizar galletas industriales para montar los sandwiches, pero, francamente no hay color y sienta mucho mejor medio sandwich casero del cual sabes todos sus ingredientes que una caja entera de industriales.
- Si tienes que sacarlos de casa he descubierto que la mejor opción es transportarlos en el cubo de la heladera bien congelado. Sólo tienes que tapar la parte superior con varias capas de trapos de cocina bien atados. Se mantendrán bien congelados a una temperatura ambiente razonable (no los pongas a 40º al sol porque no hacemos nada xD)
Lothi says
Como persona gorda, he de decir que tienes razón. Sin más. Salvo casos concretos, si estamos rollizos es porque comemos y tenemos poca actividad física. Generalmente, la culpa es más de lo segundo. Si alguien te dice que come poquísimo y que cuida lo que come y blablabla, o miente, o no hace ejercicio. O debería ir a que le miren el tiroides. Lo de «mi metabolismo es muy lento» es cierto, pero no es que tu metabolismo sea un cabr*n con patas que te sojuzga. Puedes activarlo. Si no te lo ha dicho un médico de verdad y te ha dado pastillas para el tiroides, no me lo creo. Lo del metabolismo lento es una pazguatada. Se activa moviendo ese culo que Dios te ha dado. Y las noñerías de envidiar a la vecina porque es delgada y tú no son cosas que ya se deberían haber pasado a los treinta. Y a los treinta no estás a gusto con quién eres y cómo eres (por dentro y por fuera), chata, tienes un problema. Muy gordo. Más gordo que tu culo. Mucho peor y más complicado porque la autoestima y la «autoimagen» no se curan con dieta y bicicleta.
Y ahora hablemos de los helados. Me encanta la idea. Me encantan los sandwiches helados.
Miss Vinagre says
Ya te lo dije por privado pero lo digo aqui, gracias por tu comment :*
Raisah says
Doy fe de los atracones y posteriores digestiones horribles con sonidos de manatí moribundo xDDD A mí también me pasa xDD
Miss Vinagre says
xDDDD Comer a veces es morir un poco. Todo lo que entra tiene que salir, por un lado u otro xDDD
Rosita says
ÑAM ÑAM ÑAM
Quiero ESTE helado!!! Perooooooooooooooo tengo una petición adicional xDD
Sobre lo que has dicho, como chica SuperSize que soy y que se encuentra a dieta para intentar salir mejor en las fotos dentro de tres semanas: AMÉN, HERMANA.
Por cierto, apoyo 100% ese «estás estupenda, so perra»
Estelwen says
Tienen buena pinta. No me gusta mucho el rollo especiado hindú, pero me imagino que se podrán hacer esas mismas galletas y rellenarlas con otro tipo de helado 🙂
Respecto a tu reflexión sobre la gordura, yo, que puedo mirar el tema con cierta objetividad (tengo una talla 42, lo cual significa que ni estoy obesa ni estoy delgada, sino que vengo a ser un punto medio, como el jueves), creo que tienes razón en casi todo, salvo en una cosilla: sí es cierto que, con dos candidatos en igualdad de condiciones en el tema académico y de experiencia laboral, siempre acaban contratando al de mejor aparienca física. Esto es un hecho cierto por muy poco políticamente correcto que sea, igual que en un caso similar si tienen que elegir entre un hombre y una mujer joven probablemente contraten al hombre porque la mujer se puede quedar embarazada y el hombre no. Eso, sin contar que hay ciertos trabajos (no sólo en el mundo del espectáculo, sino también de cara al público) en los que la buena presencia física es imprescindible y como estés gordo o seas feo te quedas fuera, así de claro, por mucho talento que tengas.
Tania says
Hola!
Es la primera vez que me paso por aquí, pero ya llevo siguiendo tu blog un tiempo. ¡Me encantan tus recetas! Cierto es que aún no me he animado a probar ninguna (perezosa que es una), pero algún día lo haré ¡jeje!
Comentar que aplaudo tu post totalmente. Algunas cosas me han dejado bastante KO: “Es que tu consigues trabajo porque estás delgada” –> ¿en serio? La gente está muy pero que muy mal. Es algo que acabas aprendiendo a medida que pasas años en la tierra, pero está visto que la raza humana nunca dejará de sorprenderme.
Yo antes estaba bastante gordita, comía fatal (no mucho en cantidad, pero sí bastante desequilibrado) y mi único ejercicio diario era caminar 5 minutos hasta el tren + 5 minutos hasta el curro y lo mismo al terminar la jornada laboral. En un determinado momento dije «¡basta!», fui a un médico nutricionista e hice una dieta que consistía en comer equilibradamente 5 comidas al día (y no era una dieta de pasar hambre, ¿eh? No como esas en las que para cenar te comes dos rajas de jamón york y un vaso de leche o_oU) . Bajé 13 kilos. Tras eso tuve la suerte de encontrar una actividad física que me motiva mucho y que llevo practicando de seguido dos años. ¿Resultado? Ahora estoy delgada (no flaca, sigue habiendo carne de donde tirar), como bien (aunque ligero, no me gusta atracarme porque lo paso mal … lo que no quita que de vez en cuando me zampe una buena hamburguesa, pizza…) y estoy en buena forma por hacer ejercicio.
Últimamente la gente me dice que estoy adelganzando mucho (falso, llevo bastante pesando lo mismo xD) y que debo de estar comiendo poco. Me parece que se olvidan de que tres veces por semana me pongo una armadura de unos 4 kilos encima y me doy de palos con otras personas hasta que ya no me quedan fuerzas para sujetar mi «espada» (practico esto http://es.wikipedia.org/wiki/Kend%C5%8D).
En fin, lo que quería decir con este rollo es que estoy de acuerdo con tu post. Hoy en día prácticamente nada te llueve del cielo sin esfuerzo. Y el que piense que es así, o es una persona muy muy muy suertuda, o vive en un mundo de fantasía del que le tocará despertar algún día.
Un saludete y perdón por el ladrillo!
Miss Vinagre says
Hola Tania!
¡Me encanta tu historia! Y que te hayas animado a escribirla ni te cuento. Enhorabuena por tu nuevo régimen de vida! la verdad es que te envidio porque me encantaría poder dedicar algo de mi tiempo a hacer deporte pero siempre acaba ganando el dormir! (menudo ful)
¿puede ser que estuvieras el sábado o alucino por la falta de sueño acumulada? XD
En cualquier caso, un placer! 😉
Tania says
Jajajaja, ánimo, con la de vueltas que da la vida igual un día te encuentras jugando a … yo que sé … ¡rugby! xD
Estuve, estuve, lo que pasa que demasiado a nuestra bola ><U En fin, sea lo que sea, estuvo muy chulo todo 🙂
Lo mismo digo, un placer 🙂
Miss Vinagre says
A ver si a la próxima… (bautizo???) xD
miss needles says
Soy una de esas personas que a pesar de hacer dietas ejercicio andar etc engordan lo mismo. La putada se llama «ovario poliquistico»por el cual tengo varios problemillas fisicos bastante feos. Cuando encima te dicen que no hay solución te jorobas y punto. Aun así me cuido y mucho. Soy vegetariana a penas tomo huevos o pescado el azucar y los lacteos ni olerlos, nada de trigo o gluten….si estoy mejor pero sigo gorda y lo siento pero ni lo acepto ni lo aceptaré jamás. La imagen por desgracia cuenta mas que lo que vales
realmente o tan mala soy que no me quieren ni para fregar suelos?. Y la cara de asco que
ponen. O aguantar a unos y a otros que estas
gorda porque comes mucho…mentira como
menos que ellos mas limitada y me muevo mas.
Me encanta cocinar y como dice miss vinagre lo hago sobretodo para la familia amigos o eventos, para mi ni probarlo.
Miss Vinagre says
Bueno, la imagen en muchos aspectos puede mejorar. He visto personas con una imagen personal bastante descuidada barrer en entrevistas por el magnetismo y el carisma que desprendian, también en sus relaciones interpersonales. Todo es cuestión de potenciar otros aspectos.
Pero bueno xD que la salud es lo primero!
Nemain says
Mis felicitaciones a la chef que merecido se lo tiene, por ésta y otras muchas grandes recetas. Ese helado hace salivar a cualquiera y más a una servidora que siente una atracción irremisible por el chai.
En cuanto a lo de la delgadez/gordura, he de decir que envidio a la gente con un metabolismo maravilloso de ese que le permite comer de todo sin engordar (que, aunque son pocos, a alguno conozco), pero en general envidio a la gente con fuerza de voluntad para hacer dieta/ejercicio cuando lo consideran necesario. A mí que me encanta comer y lo disfruto de forma casi orgásmica con según que platos, no se me ocurriría meterme con alguien por estar delgado; si no lo estoy sé cual es la causa y qué debería hacer para remediarlo. La gente debería mirar más por sus fallos si cree que los tiene que por criticar a los demás.
Miss Vinagre says
El Chai sin duda es HAMOR.
Aunque es cierto que hay gente con un metabolismo especial luego nos engañan y resulta que se pegan palizas de andar o correr xD
Lo del placer orgásmico… no me lo recuerdes xD que me pongo mala de pensar en los baos!