Ahhh… el verano con sus barbacoas: Chuletas, morcilla, chorizo, hamburguesas, pinchitos de pollo ya preparados… Chuletas, morcilla, chorizo, hamburguesas, pinchitos de pollo ya preparados… Chuletas, morcilla, chorizo, hamburguesas, pinchitos de pollo ya preparados… y así es como la mayor parte del tiempo discurren las barbacoas estacionales aquí en España.
Que #ojocuidao, está bien, pero el culo inquieto que hay en mí siempre quiere ir un poco más allá… porque en la variedad está la diversión (y lo pasé bien… y me gustó un montóoon). El caso es que después de muchas recetas vistas me dediqué a mezclar de todo un poco.
Para este desbarre (desbarre pero light) decidí mezclar un montón de cosas, no solo ingredientes sino técnicas, como por ejemplo cortar el pollo en tiras en vez de a dados para ensartarlas al más puro estilo saté/satay, que es como se hacen los pinchitos en el sureste asiático, en esos fabulosos mercados callejeros que algún día pisaré, Fortasec mediante. Lo que viene siendo la Street Food (estrit fud) pero sin que te lo venda un cocinero con cresta. Otra tésnica poco usada para el pollo en brochetas (Al menos en mi mundo) es marinarla con leche, que la hace un poco más jugosa, en mi casa se hace esto para suavizar los riñones o el hígado, pero lo de aplicarla al pollo fué algo que me enseñaron Sul e Ibra (¡Hrasias!)
Sriracha ¿Os he hablado ya de ella? Pues sí, muy por encima hablé de ella en este post del Banh Mi pero ya va siendo hora de hacerla protagonista. La Sriracha es una salsa picante típica del sureste asiático y sobre todo de Thailandia, su base son chiles picantes rojos maduros y ajo, completados con vinagre, azúcar y sal, el sabor para entre dulce y picante, con el toque del ajo que le da un componente adictivo del típico que no puedes parar de comer, por mucho que se te hinchen los morros a lo Carmen de Mairena.
La Sriracha la puedes encontrar en Supermercados Asiáticos o online pero recomiendo que escarbéis un poco en vuestro super asiático, porque siempre serán más baratas. La clásica es la de la marca Huy Fong Foods que se fabrica en California, y de las catas que he hecho es la que me gusta a mí. El próximo paso seguramente sea hacerla casera, pero eso es ya otra historia y será contada en otra ocasión.
Si no puedes, no quieres, o no hay forma humana de encontrar Sriracha puedes usar una buena salsa brava en sustitución, o salsa Valentina, Harissa, o salsa de chile fantasma… sólo recuerda que el picante puede variar con respecto a la Sriracha y lo mismo tienes que reducir o aumentar la cantidad. Al fin y al cabo cada uno somos responsables de nuestros esfínteres (and I did not start de fireeee)
Del resto de cosas ni hablamos, posiblemente las tengas en casa. Así que no tenéis excusa para poneros hasta arriba de pinchitos de pollo. ¿Eres vegano? No prob, sustituye el pollo por un tofu firme o por seitán, y la leche por leche de coco o de frutos secos, y para rematar cambia la miel por sirope de arce. ¡Solucionado!
Para esta receta digna de carné de patinete necesitaras: Pollo, leche, salsa picante Sriracha (mira la receta para sustituciones), miel, un poco de jengibre fresco (si no hay, no pasa nada), sal y pimienta negra.
Empezamos poniendo a remojo los pinchitos si son de madera o bambú, esto evita que se quemen demasiado y la madera se vuelva quebradiza haciendo que se rompa el palito cuando intentamos coger la comida. No te saltes este paso sobre todo si vas a hacer los pinchitos sobre una barbacoa con Llamas Reales (Tm) y esas cosas
Empieza cortando las pechugas en filetes finos si es que no las has comprado ya filetadas. Luego corta los filetes en tiras de al menos 1 cm de ancho y no menos. Procura que todas tengan un tamaño uniforme. ¿Por qué hacemos esto? Para que el pollo tenga mas recovecos y superficie en la que retener las cosas buenas de la salsa.
Acabaremos con un montoncito de tiras de pollo de mas o menos el mismo grosor. La longitud nos da un poco lo mismo, pero no las hagas daditos…
Ponemos el pollo en un cuenco con leche.
Añadimos como una cucharadita de sal colmada y la pimienta negra.
Rallamos el jengibre encima del pollo.
¡No hace falta mucho para darle buen sabor! Podemos prescindir de él pero yo creo que completa bastante bien el sabor del picante. Y yo siempre tengo una raiz de jengibre en la nevera… Nunca sabes cuando te va a doler la garganta.
Añadimos la miel.
Y la salsa picante Sriracha.
Aunque yo empiezo con cuatro cucharadas tu puedes ponerle más o menos, ¡nadie conoce tus esfínteres tan bien como tú mismo!
Remuévelo todo bien y cubrelo con film. Mételo en la nevera como mínimo una hora, y como máximo toda la noche.
Monta los pinchitos sobre las brochetas humedecidas. Empieza pinchando el extremo de una tira.
Y vuelve a pinchar la tira a unos 3-4 cm de distancia del primer pinchazo.
Repite la acción, vuelve a pinchar la tira a unos 3-4 cm de distancia del pinchazo anterior.
Aprieta la tira sobre si misma para hacer un zig zag apretadito, pero sin pasarse.
Continúa rellenando el pinchito con más tiras de pollo. Dependiendo de la longitud te dejará pincharlas mas o menos veces. No pasa nada.
Esta tira de pollo solo se deja pinchar dos veces, pero no pasa nada. Seguimos rellenando el pincho hasta llegar a la mitad.
Optativamente (pero altamente recomendado) pincelamos las brochetas con una mezcla de miel y de salsa picante.
Por delante.
Y por detrás.
Calentamos la plancha a fuego medio-alto, y la pincelamos con aceite de oliva.
Colocamos los pinchitos procurando que toda la superficie del pollo esté tocando la parrilla.
Los dejamos hacer unos 7-8 minutos o hasta que estén cocidos y dorados por abajo. Les damos la vuelta y los dejamos 3-4 minutos hasta que estén listos y dorados.
Ten cuidado por que la miel hará que se quemen mas rápido (como en las partes negras de la foto), ¡así que permaneced atentos!
Sírvelo rápidamente con una guarnición a tu elección.
- 400 gramos de pechuga de pollo limpia y fileteada
- 50 ml de leche entera
- 4 cucharadas de miel
- 4 cucharadas de salsa picante Sriracha (o tu favorita: Valentina, Harissa, Brava, Tabasco... * Ver notas al final)
- Un trozo de jengibre fresco del tamaño de media nuez. (Si no lo encuentras sustituyelo por seco u omítelo)
- Sal
- Pimienta negra
- Aceite de oliva para pincelar la plancha o parrilla
- Opcional (para untar antes de cocinar):
- 3 cucharadas de miel
- 2 cucharadas de salsa picante
- Pon a remojo las brochetas si son de bambú o madera en un recipiente con agua.
- Corta el pollo en tiras de no menos de 1 cm de ancho pero de manera uniforme
- Pon las tiras de pollo en un cuenco con la leche, la miel, la salsa picante, el jengibre fresco rallado, un pellizco grande de sal y un poco de pimienta negra molida. Déjalo reposar en la nevera cubierto durante al menos una hora o toda la noche.
- Ensarta las tiras de pollo en forma de zig zag hasta rellenar medio pincho, dejando la otra mitad sin pollo para poder agarrarlo mejor.
- Opcionalmente: Mezcla 3 cucharadas de miel y 2 cucharadas de salsa picante y pincela las brochetas con esta mezcla.
- Calienta una parrilla (o enciende una barbacoa de carbón) a fuego medio.
- Pincela la parrilla con un poco de aceite de oliva.
- Pon los pinchos de pollo procurando que toda la carne toque la parrilla.
- Deja que se hagan durante unos 7-8 minutos y transcurrido ese tiempo (o si ya estan dorados) dales la vuelta, deja que se doren durante 3-4 minutos más.
- Sírvelos con un poco de arroz basmati cocido aromatizado con pimiento picante y mantequilla. Complétalo con una ensalada.
Es importante que el pollo esté cortado en un grosor uniforme para que se haga todo por igual en la parrilla.
VEGANÍZALO: Sustituye el pollo por tofu firme o seitán y macéralo en leche de coco o de frutos secos, cambia la miel por sirope de arce, déjalo más de una hora, que todos sabemos como se las gasta el tofu de soso. Vigila los tiempos de cocción y parrillismo.
Si no tienes barbacoa pero quieres darle un toque prueba a salpicar un poco de humo líquido diluido en agua mientras se hacen los pinchitos en la plancha.
Cuanto más tiempo esté marinando el pollo mas tierna quedará la carne. Si no dispones de al menos una hora no te saltes el paso de pincelar el pollo con la mezcla de salsa y miel antes de ponerlo a cocinar.
Puedes sustituir la pechuga por contramuslos deshuesados y sin piel siempre que lo cortes uniformemente.
Si utilizas otra salsa que no sea Sriracha ten en cuenta que el grado de picante puede cambiar, la Harissa por ejemplo es sustanciosamente mas picante, y yo la reduciría a 1 cucharada para la marinada y un cuarto de cucharada para pincelarla con la miel. Haz pruebas para ver con que grado de picante estás cómodo.
Si ocurre el extraño caso de que sobren. Guárdalas bien envueltas en la nevera durante un máximo de dos dias. Caliéntalas sobre la parrilla o una sartén untadas en aceite
Rodrigo says
Pásate al zanco y deja la pechuga para los franceses…
Miss Vinagre says
Es el siguiente paso, sí! XD pero la pechuga tiene más público
IbrahimGm says
Estoy salivando sólo con leer la receta. Yummy yummy!
Miss Vinagre says
Gummy Gummy!
bego says
Querida miss Vi!!
Pero que ricas tiene que estar esos pinchitos madreeeeeeeee!!! Yo amo la siracha como los veganos el sirope de arce!! gran receta! la probare seguro!
Gracias como siempre por esos post tan animados y divertidos!!!
Besos guapa!
Miss Vinagre says
XDDD Me ha encantado la comparación de los veganos, me la guardo muy locamente!
Gracias a ti por escribir!